La terapia visual consta de unos ejercicios visuales personalizados, que realizan una estimulación neurofisiológica que ayuda a mejorar el rendimiento de las habilidades visuales y pueden ayudar a mejorar la concentración. Lo que se pretende con estos ejercicios de terapia visual, es mejorar en lo posible los problemas de visión que no se pueden tratar con gafas. Estos son: problemas de coordinación visual, ambliopía, estrabismo y retrasos en el aprendizaje derivados de la dificultad en la lectoescritura provocada por alguno de estos problemas.
Se suele programar una rutina diaria de ejercicios para hacer en casa. Cada rutina se completa con unos 15 o 20 minutos. Aparte, se combinan estos ejercicios con sesiones semanales con el optometrista en la consulta. En estas sesiones el optometrista puede ver la evolución del paciente y ajustar los ejercicios necesarios.
¿Los ejercicios de terapia visual son solo para niños, o los adultos también pueden hacerlos?
No hay edad para la terapia visual. Si bien es muy adecuada en edades tempranas para ayudar al buen desarrollo visual del niño, fundamental para el aprendizaje. En edad adulta también se pueden mejorar habilidades en problemas visuales o tratar alteraciones de acomodación, convergencia y motilidad.
¿Cómo se hace una terapia visual?
Nuestro optometrista diseña la terapia visual adecuada a cada paciente, según sus circunstancias, y personaliza los ejercicios que deberá llevar a cabo para llegar a los objetivos fijados.
Suele constar de:
- sesiones semanales en nuestra consulta en las que se trabajan diferentes ejercicios.
- sesiones diarias en casa donde el paciente realizará dichos ejercicios por su cuenta.
¿Cuáles son los ejercicios de la terapia visual?
Es importante tener muy presente que para conseguir unos resultados más que satisfactorios, deberemos tener MUCHA CONSTANCIA y dedicarle mucho empeño. En el caso de menores, será de vital importancia la participación de los padres.
Estos son algunos ejemplos de ejercicios de terapia visual:
Es importante tener en cuenta que la terapia visual debe ser supervisada siempre por un profesional.
Estiramientos oculares.
Hacemos girar los ojos en círculos siguiendo un estímulo, como la punta de un lápiz, hacia la derecha durante unos 5 segundos y después haciendo lo mismo girando los ojos hacia la izquierda. Con este ejercicio podemos mejorar la fijación y la motilidad de los ojos.
Visión periférica.
En este ejercicio se necesitan a dos personas una enfrente de la otra, el paciente debe mantener la fijación en los ojos de la otra persona que se colocará delante de ella con los brazos estirados y debe contar cuántos dedos se le muestran sin necesidad de mover los ojos ni la cabeza. Entrenar la visión periférica ayuda a mejorar la visión en deportes de equipo dinámicos y la fluidez en la lectura al tener una visión más generalizada del campo visual que percibimos.
Motilidad: seguimientos y sacádicos.
Podemos mejorar nuestros seguimientos realizando laberintos siguiéndolos sólo con nuestros ojos o realizar movimientos sacádicos con el ejercicio del reloj de manera aleatoria. De esta manera, una mejora de ambos movimientos nos proporcionará un mayor rendimiento de los movimientos oculares y por ello, una mejora durante la lectura.
Ejercicio de enfocar cerca y lejos.
Se realiza con un estímulo enfrente de nuestros ojos (a unos 20-30 cm) y un objeto lejano o carta de letras, realizaremos cambios de enfoque de lejos a cerca viendo siempre nítido y lo más rápido posible. Haciendo esto durante 2 minutos diarios, podremos mejorar la flexibilidad o rapidez acomodativa.
Convergencia.
Cogemos un lápiz y estiramos el brazo, lo acercamos poco a poco hacia nuestra nariz intentando ver una sola punta, sin llegar a ver doble. A medida que trabajemos este ejercicio y consigamos acercar más el lápiz a nuestra nariz, iremos mejorando la capacidad de convergencia de nuestros ojos, necesaria para realizar tareas prolongadas en visión próxima.
Percepción visual y atención.
En este ejercicio debemos intentar decir los colores lo más rápido posible, evitando leer las palabras. Este es un ejercicio que ayuda a mejorar la atención y la concentración.
Durante la terapia visual en niños con dificultades de aprendizaje que presentan ciertas habilidades perceptuales limitadas, podemos realizar ejercicios como este, realizar también juegos de memoria visual o tangrams, que nos permitirán mejorar la percepción de la información que reciben a través de sus ojos, y que les proporcionará un mayor rendimiento sin sobreesfuerzo.
Estos son algunos ejemplos de ejercicios básicos, de sencilla realización, que se pueden realizar durante el plan de terapia visual personalizado que su optometrista especializado en terapia visual le podrá recomendar que realice. La dificultad aumenta según la evolución. La incorporación de programas informáticos, material y equipos específicos de trabajo nos permiten reducir los tiempos de recuperación.
Para más información sobre cómo realizamos las terapias visuales u otras dudas, no duden en ponerse en contacto con nosotros y les citaremos para una evaluación optométrica i/o oftalmológica en el caso de que sea necesario.